Se dice que las empanadillas son originarias de Arabia o de la
Antigua Persia y que llegaron a la península en las alforjas de los invasores
musulmanes sobre el siglo VIII junto con los almíbares, los hojaldres, los
alfajores, los arropes y tantas otras deliciosas recetas de herencia árabe que se han
hecho muy nuestras.
Las empanadillas llegaron a Granada y alrededores convirtiéndose
en un plato muy típico de la península.
Luego los colonizadores españoles la llevaron a América, y en concreto a la región andina y allí se convirtió en uno de los platos
típicos de la zona. En cada región la rellenaban con productos autóctonos de
cada zona: más y menos picante, más o menos jugosa, con carne o con verduras,
fritas o al horno. Todas realmente exquisitas y aromatizadas según el lugar.
Desde hace días que vengo pensando en hacer unas empanadillas diferentes
y hoy me he atrevido a dar con el relleno adecuado.
Entre que una de mis hijas es vegetariana y la otra detesta el
atún me he de inventar diferentes rellenos si quiero disfrutar de unas ricas empanadillas.
Hoy han quedado con un sabor dulce gracias a la manzana y con
un toque salado dado por el queso.
Los frutos secos le dan un punto y textura diferente y aportan proteína al
plato junto con el queso.
Pero mejor vamos yendo a la cocina que han de estar listas
para la cena.
Ingredientes
para las Empanadillas
-16 obleas para hacer empanadillas.
-2 cebollas grandes.
-Maíz dulce ecológico.
-1/4 de queso de cabra.
-1 manzana tipo Golden.
-Frutos secos cortados (nueces, almendras, avellanas…)
-1 cucharada de miel.
-Pimienta negra molida.
-Nuez moscada molida.
-Orégano.
-Sal marina.
-Aceite de oliva virgen extra.
-Pimentón de la Vera.
Elaboración
de las Empanadillas
Cortar las cebollas y rehogarlas en una sartén con aceite de
oliva virgen.
Añadir la manzana cortada a dados.
Echar el maíz y si puede ser ecológico (digamos no a los trangénicos), el queso cortado a cuadrados y las especias a vuestro gusto.
Salar con moderación.
Incorporar la miel mientras se van pochando todos los
ingredientes.
Rellenar las obleas y pintarlas con aceite mezclado con
pimentón de la Vera.
Meter en el horno a 180ºC hasta que estén doradas.
Ese contraste entre dulce y salado os va a encantar. En casa
no han dejado ni la muestra.
Montse, estas empanaditas deben estar exquistas. Me encanta la combinación de sabores que elegiste. ¡Una delicia!
ResponderEliminarBesos.
Si que quedaron ricas. Gracias por tu visita. Besos.
Eliminarguauuu montse que rico y que buenisima combinación , solo verlo se me hace la boca agua, me ha encantado la receta.
ResponderEliminarbesitosss noe
Y que poco duraron en la mesa, al estar hechas al horno no hinchan tanto como fritas. Besos.
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